Ayer 17 de Mayo, se celebró el Día Mundial de la Hipertensión Arterial.

Pero, ¿Sabemos de qué estamos hablando cuando nos referimos a la tensión arterial?  A parte de conocer sus valores…12-7… ¿Qué riesgos implica tener hipertensión? 

Empezaremos por definir la tensión arterial. La tensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las arterias, al ser bombeada por el corazón. 

Cuanto más esfuerzo debe realizar el corazón para bombear, mayores son los valores de tensión. 

La hipertensión es una patología crónica, en la que los vasos, tienen una tensión incesantemente alta, lo que puede llegar a dañarlos. 

La presión máxima se obtiene en cada contracción del corazón y la mínima, en cada relajación cardíaca.

Los síntomas de la hipertensión pueden no ser claros, tardan en manifestarse; la hipertensión es el factor de riesgo cardiovascular de mayor prevalencia (la padecen el 40% de los españoles). 

La primera causa de mortalidad en España, son las enfermedades cardiovasculares. Una hipertensión mal controlada, puede desencadenar en complicaciones graves como: infarto, insuficiencia cardíaca… 

Las causas específicas de la hipertensión todavía no se conocen, pero si podemos distinguir: 

      – No modificables: Factores genéticos, sexo, edad y raza

      – Modificables:

  1. Sobrepeso y Obesidad : A medida que se aumenta el peso, se eleva la tensión arterial. Es todavía mas evidente en los menores de 40 años y mujeres. Pacientes obesos, independientemente de su edad, presentar una frecuencia entre 2 y 3 veces superior a la de los pacientes con peso normal. La reducción de peso, conlleva en la mayoría de los casos, una reducción en los valores de tensión.
  1. Vasculares: Los problemas relacionados con el riñón pueden influir en la aparición de la hipertensión arterial.
  1. Endocrinas: En éstas se incluyen desequilibrios hormonales exógenos y endógenos. La toma de anticonceptivos orales, la toma de AINES mantenida en el tiempo puede incrementar los valores de tensión en pacientes controlados e incluso en normotensos; … 
  2. Drogas  y tóxicos: Alcohol, nicotina… 

La tensión arterial, valora

Tensión sistólica (conocida popularmente como “la alta”):  Mide la tensión que genera el corazón al bombear la sangre al resto del cuerpo

Tensión Diastólica (conocida como “la baja”): Mide la presión en los vasos, entre los latidos del corazón. 

Se mide en mmHg (milímetros de mercurio). 

Clasificación: 

Normal: de 120/80 a 129/84 mmHg.
Normal alta: de 130/80 a 139/89 mmHg.
Hipertensión estadio 1: de 140/90 a 159/99 mmHg.
Hipertensión estadio 2: de 160/100 a 179/109 mmHg.
Hipertensión estadio 3: mas de 179/109 mmHg.

¿Qué medidas de prevención debemos adoptar? 

– Evitar el sobrepeso y la obesidad

– Tener hábitos de vida saludables : dieta equilibrada y práctica regular de actividad física 

– Evitar hábitos tóxicos

Tratamiento:

El tratamiento infalible es la prevención. Para ello, tal y como hemos mencionado debemos seguir un estilo de vida cardiosaludable: 

-Evitaremos el tabaco. El tabaco aumenta la presión arterial y la frecuencia cardiaca. Además, las personas hipertensas fumadoras multiplican el efecto perjudicial del tabaco. 

– Cuidado con el alcohol. El consumo excesivo provoca el incremento de la presión arterial y otras alteraciones perjudiciales el corazón y otros órganos.

– Controla tu peso. El sobrepeso es una causa de hipertensión. Rebajarlo reduce la presión arterial y disminuye el riesgo cardiovascular y de diabetes.

– Evita los embutidos, los lácteos enteros, las carnes grasas

– Consume de 3-4 veces a la semana como mínimo pescado

– Escoge aceite vegetales, preferentemente aceite de oliva, para cocinar y aliñar tus platos.

– Modera tu consumo de grasas escogiendo cocciones como hervido, a la plancha, parrilla, papillote, etc. y evitando o moderando los fritos y los rebozados.

– Alcanza tu dosis de calcio: consumir 2 raciones de lácteos diarias, es decir, por ejemplo, 1 vaso de leche y 2 yogures.

– Cuidado con el regaliz

– Limita la ingesta de sal, vigila el salero durante el cocinado, y nunca lo lleves a la mesa. 

– El consumo recomendado de sodio al día es de 1300 mg, teniendo en cuenta que los alimentos ya aportan sodio, si padeces hipertensión, debes evitar la sal de mesa.

– Evita las sopas o purés de sobre, los brick o los potenciadores de sabor tipo Starlux… 

– Cuidado con el consumo de precocinados que normalmente tienen adicionada ya altas cantidades de sodio. 

– Revisa  las etiquetas. Evita o modera aquellos productos en los que se adicione sodio (Na), cloruro sódico  (NaCl), glutamato monosódico o carbonato sódico.

No pasaremos a mencionar el tratamiento farmacológico, ya que este debe ser pautado siempre bajo prescripción y vigilancia facultativa. 

Los resultados no siempre reflejan una reducción inmediata de la presión arterial, así que es necesario esperar un poco antes de plantearle al médico un cambio de medicación.  

El tratamiento debe compatibilizarse siempre con el estilo de vida cardiosaludable.